Probadores


Después de hacer el amor, tras estar un rato ronroneando en la cama, ella acostumbraba a ponerse alguna ropa mía al levantarse. Un día una camiseta, otro día una camisa, el día siguiente mi pijama. Yo iba declarando cada prenda usada por ella bien de interés cultural y la guardaba en el armario como el más preciado trofeo. Sobra decir que se me iba el sueldo en ropa.

... y cuando esté escandalizada
susúrrame al oído que me amas ...
En audición: Malú "Ven a pervertirme"

1 rastro:

Sin pensárselo dos veces Anónimo garabateó:

Que bonito! Y si se pone tu perfume, como harás para guardarlo y robárselo de su piel?

Y si cuándo se despierte te das cuenta que viste tu corazón. Como podrás negarte a regalárselo en lugar de guardarlo en tu armario?

Saludos :)

Publicar un comentario

Desde aquí puedes dejar un rastro...