No he estado parado

Ni mucho menos. Y en todos estos meses he estado leyendo, no sé si bastantante o qué, eso que lo juzguen los que se dedican a hacer encuestas sobre el nivel de lectura en España. Pero lo que sí está claro es que he seguido leyendo a mi ritmo. Así pues, en los últimos meses cayeron:

LA CAZA DEL CARNERO SALVAJE de Haruki Murakami, cómo no, al parecer, mi escritor de cabecera. Un treintañero recién divorciado, desencantado de su propia juventud, dueño junto a un socio alcohólico de una agencia de publicidad, en su última campaña de publicidad ha fotografiado una fotografía de un rebaño de ovejas en la que sale un carnero que no puede aparecer en ninguna fotografía, porque no existe en la realidad. Una mujer que le seduce por la perfección absoluta de sus orejas completa el mapa de la fantástica narración en la que describe la búsqueda del carnero, cual Santo Grial.

LA JAURÍA Y LA NIEBLA de Martín Casariego, otro de mis autores gurús. Tres historias ambientadas en el País Vasco que se entrelazan en el libro de Casariego, una sobre el acoso escolar que sufre Ander por parte de sus compañeros de clase por tener un apellido español, otra del hermano pequeño de Ander al que sus compañeros de clase andan intentando desvelar el verdadero origen de los Reyes Magos y, por último, la historia de Ignacio Mayor, escritor de relativo éxito que acude al instituto donde estudia Ander para impartir una conferencia. Unas historias que juntan violencia, dolor, ternura, pérdida de la inocencia y esperanza.

ÚLTIMAS TARDES CON TERESA de Juan Marsé. Ambientada en una Barcelona de contrastes y claroscuros nos cuenta los amores de Pijoaparte, típico exponente de las clases más bajas de Barcelona, heredero de la novela picaresca española y de Teresa, bella y rubia, procedente de la alta burguesía catalana. Un amor imposible que deberá pasar mil vicisitudes y ni aún así es seguro que pueda consolidarse.

UN GRAN CHICO de Nick Hornby nos cuenta la hilarante a veces vida de Will, un adulto que ha vivido toda la vida de las rentas que le proporciona una famosísima canción de navidad que compuso su padre. Un buen día decide que las mujeres separadas son las más fáciles de conquistar y, para conseguirlo, se apunta a un grupo de padres separados simulando tener un hijo. Es así como conoce a Marcus y a su madre, medio chiflada, que acaba de intentar suicidarse. Una novela ligera, divertida y de fácil lectura que nos hace plantearnos para qué estamos en el mundo y qué esperamos de nuestras vidas.

LA SOLEDAD DE LOS NÚMEROS PRIMOS de Bruno Giordano. Ciertos números primos, aquéllos divisibles sólo por uno y por sí mismos, solo están separados por un número entre ellos. Son los llamados primos gemelos. Es el caso del 11 y el 13, por ejemplo, sólo separados por el número 12. Con esta premisa matemática el autor construye un relato basado en la afinidad de seres tan extraños, tan distintos, tan especiales como los números primos más cercanos entre sí, condenados a una cercanía próxima a otro igual a ellos pero sin que exista el roce de la proximidad inmediata. Sólo una pequeña distancia los separa, como a Mattia y a Alicia, siempre cercanos pero nunca juntos.

... nada que perder

mírame reír

volveremos a salir ...

En audición: Pignoise "Nada que perder"