Hombre al agua


- Hola. Buenos días. Le llamo del departamento de atención al cliente de Lycos España.

- ...

- Mire, es que nos hemos dado cuenta que hace casi un año que no utiliza nuestro servicio de chat y queríamos saber si es que tiene usted algún problema al conectarse al servicio.

- ¿Cómo dice? - estoy alucinando con la llamada, claro.

- Pues eso, caballero, que como hace más de diez meses que no entra en el chat ha creado una honda preocupación en el servicio de atención al cliente de Lycos España y le llamamos para saber si es que tiene algún problema específico con nosotros.

- No, verá, no hay ningún problema. Solo que no tengo interés en chatear en estos momentos. Pero estoy alucinando, ¿cómo han conseguido ustedes mi número?

- No sé preocupe usted. Es habitual para nosotros conseguir los teléfonos de nuestros clientes. Digamos que tenemos nuestros contactos y nuestras fuentes de información.

- Perdone pero yo no era cliente suyo. Simplemente había registrado un nick en su servicio. Creí que era algo gratuito y voluntario acceder al chat.

- Y así es, caballero. Pero nos gusta fidelizar a nuestros buenos clientes y usted ya casi estaba en lo más alto de la pirámide estructural del chat. Eran muchas horas de chat como para que no nos preocupemos por su ausencia. Entiéndanos.

- No. No les entiendo.

- Política de la empresa, caballero. Yo solo soy un mandado. Me limito a cumplir con el trabajo que me asignan. Y mejor que vender seguros por teléfono es.

- Mire, en este momento no tengo ningún interés en volver al chat, pero, entiéndame, no es que crea que yo soy mejor que la gente que entra el chat. Yo mismo he sido usuario varios años y no se me caen los anillos en reconocerlo. Pero en este momento no tengo ninguna motivación para entrar. Ni tiempo.

- Ah, entiendo. Es usted de los que ha conseguido una vida plena fuera del chat.

- Puede decirlo así si quiere, pero mi vida no era peor cuando entraba en el chat. Yo no tengo esa impresión. Solo que ahora tengo otros intereses y otros asuntos que atender. El tiempo que dedicaba al chat ahora lo dedico a otras cosas que me parecen más productivas por el momento.

- Muy bien caballero. Veo que no voy a poder convencerle para que vuelva entre nosotros. Una pena, pues era usted un posible candidato a oficial del chat y era muy valorado entre la gente de su lista de amigos.

- Lo sé, pero no necesito una lista de amigos para saber quiénes son mis amigos. Y ahora, si me disculpa, tengo cosas que hacer. Le rogaría que borrara mi número de teléfono de sus archivos ...

- La letra pequeña, caballero. No puedo hacer eso si no lo solicita por escrito. Ya sabe, la Ley de Protección de Datos y esas cosas ...

- Buenos días - y cuelgo.

Todavía estoy alucinando por la llamada. ¿Habrá sido alguna broma de alguien? ¿Supera la ficción a la realidad casi siempre?

... pero todo lo que entra ha de salir,
y los que están tendrán que partir
empezando por mí ...
En audición: Shakira "Te aviso, te anuncio"

1 rastro:

Sin pensárselo dos veces Anónimo garabateó:

Lo reconozco, he sido yo la que di tu número de teléfono, ya sabes, por los viejos tiempos.

Publicar un comentario

Desde aquí puedes dejar un rastro...